23 de mayo de 2009

Redes: Padres e hijos

En este camino que intento encontrar para ofrecerles a mis hijos lo mejor que esté a mi alcance (y no me refiero a ropa de marca o clases de piano), ando planteándome la "corriente" bajo la que criamos a nuestros pequeños, donde yo misma me incluyo. Analizando esa corriente y mi propia forma de hacer, estoy intentando separar lo que SI quiero coger de lo que rotundamente creo que no les beneficia. No soy nadie para juzgar y no pretendo hacerlo, pero en estos días analizo bastante la visión que tenemos de lo que significa tener un hijo, y me encuentro con cosas y actitudes que no me encajan, que me dicen que "algo falla", que algo se nos escapa.
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Frecuentemente oigo a papás que defienden a capa y espada que los bebés vayan a la guarderia para "socializarse" y me parece un robo a mano armada que se nos pueda llegar a inculcar algo así. (Y conste que mi hija va a la guardería por las mañanas desde que tiene un añito y que no me queda otra que llevarla... Aunque he de decir que todas las chicas de la guarde son unos amores y estamos muy contentos, pero si pudiera, no la llevaría.)
Hace poco escuchaba a un papá de una bebita de 10 meses excusarse de que hasta septiembre no podría llevarla a a guardería, con lo bien que les iba estar con otros niños... mientras miraba a su hija con ternura y se podía leer la pena que le daba "tener que hacer aquello por su bien", mientras lo decía. ¿Quien le ha dicho a ese papá que TIENE que llevar a su bebé a la guardería en lugar de decirle "disfrútala, estos días, estos meses, no volverán jamás y pasarán antes de que te hayas dado cuenta. Tendrá toda la vida para socializarse, no le va de estar con mamá y papá el primer año de su vida... Si puedes, no lo dudes!". Bueno, yo se lo dije..., él contestó: "también es verdad..."
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Hay madres que creen al dejar a sus bebés de 4 meses en la guardería, teniendo el culito limpio y la barriga llena, quedan cubiertas todas sus necesidades. Escuché a la mamá de un bebe de 5 meses enfadarse con la profesora de la guardería por eso, porque la profesora le decía que era demasiado pequeño para pasar 10 horas en la guardería sin hacer antes un periodo de adaptación. "¿De qué se iba a enterar el niño si tenía el culo limpio y la barriga llena, por favor!!!?" -dijo la mamá-. Me partió el alma, de verdad...
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Se que muchas familias se ven en la obligación de pasar por una guardería tan pronto acaban las 16 míseras semanas de maternidad que tenemos en este país... y que es "o eso o nada", por mucho que les duela tenerlo que hacer así. Creo que es muy, muy triste que nos tengamos que ver en muchas ocasiones en las tesituras que se nos llegan a plantear para poder traer una criatura, una trocito de nosotros, el fruto de nuestro amor, al mundo.
También hay mamás que manifiestan "yo no voy a renunciar a mi vida profesional por quedarme con mi hijo". Bueno, supongo que muchos años de estudio pueden llegar a hacer que una mujer se lo plantee así... pero yo creo que pueden haber alternativas intermedias, en lugar de que el único perjudicado sea el bebe que no le había pedido a nadie que lo trajeran a este mundo. Conozco mujeres que embarazadas proclamaban a los cuatro vientos que no iban a dejar su carrera profesional por sus hijos ¡ni locas!, y cuando los han tenido que dejar en la guarderia se han replanteado hasta los cimientos de su vida. Esas me han tocado la fibra, me han hecho sentir lo poderosa que puede llegar a ser la maternidad...
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No critico a ninguna de estas madres, cada una tendrá sus circunstancias y criterios personales y seguro que todas desean lo mejor para sus pequeños, lo que ocurre es que me da una pena tremenda que se vea a los niños, a nuestros hijos, de esa forma... como el "complemento" en lugar de "el todo".
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Desde luego, los "ejemplares" (a mi juicio lamentables) ejemplos que dan las ministras en este país de lo que es la maternidad, no creo que ayuden demasiado. Yo es que ni siquiera las dejaría salir por la televisión diciendo las cosas que llegan a decir, me llega a parecer hasta anti-humano, de verdad. ¿Qué sería de nuestra especie si todas dejáramos a nuestros hijos al mes de nacer? Dónde quedaría el papel de madre si nuestros bebés pasan mas horas al día con una canguro que con la mujer que les dio la vida? Teniendo la posibilidad (económica) de pasar los primeros años de la vida de sus hijos con ellos, me da una pena tremenda que vean como triunfo "quitárselos de encima" antes de tiempo en lugar de disfrutarlos a su lado.
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Sea cual sea el caso, no creo que ver el siguiente vídeo le haga daño a nadie... y para quien quiera saber más, os dejo la dirección de Eduard Punset, el director que ha llevado a la pantalla de la 2 estos "descubrimientos" a través del programa Redes. (Gracias, Gea!):
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PADRES E HIJOS
¿Quién nos enseña a ser padres? ¿Qué hay que saber para convertir a un bebé en un adulto sano? La ciencia ha confirmado la importancia de la relación entre padres e hijos en los primeros años de vida, y aporta nuevas pistas para una educación más emocional y más provechosa.
Hace muy pocos años, nadie pensaba que lo que les pasaba a los niños influiría en cómo se comportarían cuando fueran adultos. Nadie veía esta relación misteriosa entre la infancia y el comportamiento de los adultos. Lo que hemos descubierto -y esto todavía no se sabe en la calle de manera suficiente- es que, una gestión deficiente, privada de cariño y de inteligencia, de las emociones de un niño, en edades muy cortas, incide de manera muy directa en el comportamiento de este niño cuando es adulto.
Por ello, este domingo, 17 de mayo, hablaremos en Redes con
Jay Belsky, psicólogo de la Universidad de Londres y uno de los mejores especialistas del mundo sobre psicología familiar, para que nos enseñe a ser mejores padres.
Os dejo algunas reflexiones que grabé en Londres después de hablar con Belsky.


VER VÍDEO (30 minutos)


1 comentario:

  1. Gracias por hacer este artículo, me ha hecho mucha ilusión!!
    Esperemos que le sea útil a la gente.
    Saludos!!

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